PRIMER DOMINGO DE CUARESMA
Las Tentaciones de Jesús
Leer textos: Deuteronomio 26,4-10/ Salmo 90/ Romanos 10,8-13/ Lucas 4,1-13
Reflexión:
No solo del pan vivo el hombre.
Los evangelios sinópticos (Marcos, Mateo y Luca) ponen este pasaje de las tentaciones de Jesús como preparación a su vida publica. Son tres pruebas concretamente: la tentación de un ser un Mesías con poderes mágicos y espectaculares; la de ser un Mesías con poder político y económico; y la tentación de hacer valer su condición de Hijo de Dios para evitar todo tipo de sufrimiento.
Aunque las tentaciones aparecen al inicio de su actividad, en realidad se presentaron a lo largo de toda su vida en distintos momentos. En mas de una ocasión encontramos a la gente que le pide una señal del cielo, una prueba contundente para que pudieran creer en él (Mt. 12,38; Lc11,29; Mc 8,11). En otras, la gente se emociona con sus palabras y tratan de hacerlo rey (Jn 6,15); así mismo tuvo que batallar mucho con sus discípulos para hacerles entender que no había venido a buscar e poder ni los privilegio de los grandes de este mundo (Mt 18,1;Mc 9,33). Y, por ultimo, poco antes de ser apresado por las autoridades y condenado a muerte, en el huerto de los olivos fue tenado a evitar el sufrimiento que le esperaba; pero también ahí, en el momento de dolor, supo vencer la prueba (Mt 26,39)
Es importante señalar el lugar donde suceden estas tentaciones del maligno, en el desierto; el cual es, en la tradición profética, el lugar ideal del encuentro del hombre con Dios (Dt 32,10; Os 2,16). Jesús quiere encontrarse con Dios y discernir su plan divino sobre el. El tiempo de
Cuaresma nos invita también a ir al desierto, entendido como un lugar solitario, sin distracciones, para revisarnos a nosotros mismo, todo lo que hacemos y como lo hacemos; para discernir el plan de Dios sobre nosotros.
No tengamos miedo y dejémonos guiar por el Espíritu, para enfrentar nuestras pruebas, esas ideas y proyectos engañosos que solemos tener en la vida. No permitamos que el ritmo de vida nos lleve adelante sin darnos tiempo de hacer un momento de desierto, de oración mas intensa, de meditación profunda. No es tiempo perdido; pues Jesús mismo dijo: “No solo de pan vive el hombre…”.
¿Qué proyectos personales tengo? ¿Cómo y porque los estoy realizando? Como me preparo para tomar decisiones? ¿Qué espero obtener de mi trabajo: fama, poder, riqueza? ¿Qué es lo ms importante de mi vida?
Oración personal…
Oh Señor, que las tentaciones de esta vida no me hagan titubear ni por un instante. Y si por alguna razón llega a suceder, permíteme que sepa mantenerme firme y que por mas atractiva que se presente esa tentación no olvide que nada tiene mas valor que permanecer en Tu Amor!
Propósito:
Hoy buscaré cinco minutos para estas a solas con Dios y conmigo mismo.